Un Rastreo por la Teoría de la Enfermedad Única
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Resumen
En la historia del pensamiento acerca de la salud y la enfermedad, en esa exploración sobre por qué nos enfermamos, para qué nos enfermamos, hay una idea, una posibilidad que fascinó a distintos estudiosos.
Eso, tan cautivante, podría formularse así: “¿no será que los seres humanos nos enfermamos por una razón que es anterior, primaria con respecto a los virus, a las comidas que nos caen mal, a la pequeña caída que terminó en fractura?”.
¿Qué había en vos, en mí, en cada uno de nosotros antes de enfermarnos? ¿Qué nos predispuso a enfermar? ¿Cuál es la causa última de la enfermedad sobre la que innumerables tratados de patologías, higiénicamente compartimentados, no ofrecen pistas?
Nosologías a las que, benévolo, Marañón llamó “artilugios pedagógicos”. Espejitos y espejismos que ilusionan al desprevenido médico cuando ve que se positiviza una placa de Petri, pero nada dicen sobre el fondo de la cuestión.
Pues bien, sobre tan misteriosa raíz, sobre esta etiología-madre de la que ramifican los vistosos e interminables cuadros clínicos, muchos fueron los que quemaron sus pestañas, entre ellos Samuel Hahnemann y Enrique Pichon-Rivière. Esta colaboración trata acerca de la manera en que esos hombres escarbaron aquella raíz. También deseo mostrar cómo pudieron entrecruzarse sus caminos.
Abstract
In the history of our thoughts about health and sickness , in that exploration of why and what for we get sick, there is an idea, a possibility that fascinated different researchers.
This so cautivating could be formulated like this: “Could it be that us human beings we fall into sickness for a reason that is first or primary regarding the virus, the food which is not good for us or the fall that finished with a fracture?”
What whas in you, in me, in each one of us that led to our sickness? What made us predetermined to get sick? Which is the las cause of the sickness where a large amount of studies of different pathologies, higenicly divided , do no offer clues?
Nosologies in which Marañón kindly callled “pedagogical contraptions”. Mirror and y iluminations that blind the carefree doctor cuando he sees that the Petri plaque positivizes but nothing is mentioned regarding the the bottom of the issue.
Well, regarding the mother ethiological of the ramification of the virtues and never ending clinical cases, many were the ones tha burnt thier eye lashes, including Samuel Hahnemann. This colaboration is about the way in which these men dug deep into the roots. Also I would like to show how their paths could of cross over their paths.
Importante: artículo publicado originalmente en la revista Homeopatía, órgano oficial de la Asociación Médica Homeopática Argentina. 2014, volumen 79, número 4; páginas 237-245.